Situada frente a las costas de Venezuela, en esta isla caribeña siempre es verano. Con sus costas batidas por el viento y unas playas paradisíacas en las que despuntan las ruinas de los molinos de oro de Bushiribana y el parque de Hooiberg, Aruba está hecha para el relax.
Situada en el parque nacional de Arikok, esta poza entre las rocas solo es accesible a pie. Prepárate para disfrutar de un baño refrescante, practicando esnórquel entre los peces y de unas vistas impresionantes de la isla.
La capital de Aruba atrae a los visitantes que desean disfrutar de playas impolutas, paisajes naturales y manifestaciones culturales. Puede visitarse arquitectura civil de época colonial y la catedral de Santa Ana y comprar artesanía local en el mercado.
Los restos de esta nave alemana que se hundió en las costas de la isla durante la Segunda Guerra Mundial pueden explorarse en submarino o mediante inmersión.
Extensa y profunda, esta cueva calcárea posee, además de caprichosas formaciones rocosas, pinturas rupestres de más de un milenio de antigüedad realizadas por los caquetíos, un pueblo nativo de la isla.
Esta granja alberga un gran número de especies diversas de lepidópteros tropicales en sus jardines. La visita incluye un "tour" explicativo sobre el ciclo vital de estos insectos.
La temporada alta cubre los meses de diciembre a abril y es el período en el que la ciudad se llena de turistas. Septiembre y octubre resultan más económicos y relajantes. El carnaval arubeño es uno de los mayores eventos de la isla, junto al festival de música Aruba Soul Beach, que se celebra en mayo, y la regata Aruba Heineken Catamaran, en noviembre.
Los ciudadanos de la Unión Europea no necesitan ningún visado y pueden entrar en el país presentando un pasaporte válido, si bien la permanencia máxima es de treinta días.
Con Air France, British Airways y United puede viajarse desde Madrid y Barcelona a la ciudad de Oranjestad. El vuelo tiene una duración aproximada de veintiséis horas e incluye, al menos, una escala.
Compañías como Royal Caribbean, Carnival Cruise y TUI Cruises operan cruceros que llegan al puerto de Oranjestad desde Nueva York, Miami y Boston.
Buena parte de los alojamientos de la isla están constituidos por resorts con acceso a la playa, como el Marriot, el Divi y el Holiday Inn. Algunos disponen de piscina, gimnasio, campo de golf y casino. Existen también apartamentos y villas, como el Beach House Aruba, además de apartoteles.
Taxis y autobuses son los medios de transporte público más comunes en Aruba. La isla también dispone de tranvías eléctricos gratuitos que unen el puerto con el centro de Oranjestad. Una carrera en taxi desde el aeropuerto hasta los principales resorts de la isla cuesta entre unos 36 AWG y unos 54 AWG (18 EUR y 27 EUR, respectivamente).
La compañía Arubus opera más de diez líneas que conectan el aeropuerto Reina Beatrix con Oranjestad y permiten realizar una visita turística relajada por la isla. Un billete de ida y vuelta cuesta en torno a los 4 AWG (2 EUR).
Pueden alquilarse vehículos en el aeropuerto Reina Beatrix. Se requiere estar en posesión de un permiso de conducción válido, preferiblemente internacional, y ser mayor de veinticinco años. El precio de alquiler parte de unos 36 AWG (18 EUR) diarios.
El uso de tarjetas está extendido en la isla y existe una red articulada de cajeros en el territorio. La mayoría de las tiendas acepta el pago tanto en AWG (florines arubeños) como en USD (dólares estadounidenses). Un menú para dos personas ronda los 108 AWG (54 EUR) y una cerveza de importación, unos 7,20 AWG (3,60 EUR).