Macao es conocido por ser el paraíso de la ostentación, el lujo y el juego. Precisamente por ello, se le considera como el Las Vegas asiático, pues reúne innumerables casinos y turistas llegados de todos los rincones del mundo. Sin embargo, este territorio también permite disfrutar de su historia colonial portuguesa y su fusión con la cultura china, visible, sobre todo, en los muchos azulejos que adornan los templos.
La influencia portuguesa es palpable gracias a la catedral de San Pablo, aunque solo queda en pie la fachada de esta, ya que fue destruida por un incendio en el año 1835. De hecho, estas ruinas forman parte de las Siete Maravillas de Origen Portugués del mundo.
Al sur del distrito de Macao, se encuentra el poblado de Taipa, que conserva la tradición histórica del territorio. No busques ningún plan, solo pasea por sus calles estrechas y laberínticas en las que encontrarás muchos comercios.
El casco antiguo de Macao permite a los visitantes conocer de primera mano la influencia portuguesa y disfrutar de muchos de sus monumentos, como la primera iglesia que hubo en China, la de Santo Domingo.
Más allá de las influencias portuguesas, Macao también tiene su propia cultura y sus templos chinos. Uno de ellos es A-Má-Gau, situado en la parte antigua de la ciudad.
Imitando a Las Vegas, el Strip de Cotai se encuentra entre las islas de Taipa y Coloane y alberga multitud de complejos hoteleros y salones de juego.
Macao es un país con un clima subtropical bastante húmedo, aunque en los meses de primavera, verano y otoño el clima suele ser cálido, con una media de unos 23 °C. Estos meses son los ideales para visitar el país, aunque también es bonito pasar la Navidad en las calles de la ciudad.
Como Hong Kong, Macao permite la entrada de forma libre de cualquier ciudadano que disponga de un pasaporte con validez de seis meses. El permiso de estancia se otorga por un máximo de noventa días.
El avión es la única manera de ir desde España hasta Macao. La opción más económica es volar a Hong Kong y, después, desplazarse a Macao, aunque también cuenta con un pequeño aeropuerto internacional con conexiones a Japón, Singapur, Corea y varias ciudades chinas.
Macao ofrece al turista un gran abanico de alojamientos, desde albergues o posadas en la zona de Coloane en la costa, hasta lujosos complejos hoteleros con casinos en Cotai. Por otro lado, también encontrarás hoteles de rango medio en la zona antigua.
El transporte público es la mejor forma de moverse en Macao, con una buena red de autobuses y minibuses que permiten llegar a cualquier zona del distrito. La tarifa es de poco más de 6 MOP (alrededor de 0,67 EUR) por viaje sencillo. Los taxis también representan otra alternativa, aunque los precios son bastante más elevados, con una tarifa de unas 100 MOP (11 EUR) por un trayecto de diez kilómetros. En caso de ir al aeropuerto, te cobrarán un suplemento de unas 5 MOP (unos 0,55 EUR).
Otra buena opción para viajar por Macao es alquilar un coche, aunque debes saber que se circula por la izquierda, como en su vecina Hong Kong. Las carreteras están en perfecto estado y el precio medio del alquiler de un día es de unas 400 MOP (45 EUR, más o menos).
El coste de la vida en Macao es muy variable en relación con tus objetivos de viaje. Los mejores hoteles cuentan con restaurantes de categoría superior, con precios de unas 600 MOP (alrededor de 66,50 EUR) por comida, mientras que almorzar en un mercado local cuesta apenas 35 MOP (sobre 3,80 EUR). Por su parte, un billete completo para un casino alcanza las 600 MOP (66,50 EUR, aproximadamente).