Eslovenia es un país de vegetación abundante, con montañas y bosques que cubren gran parte del país. Un destino que le encantará a los amantes de los deportes en la naturaleza, donde podrán hacer "rafting", escalada o senderismo. Sus ciudades son una mezcla de arquitectura veneciana y modernista en las cuales degustar un plato de "bograč" o su pastel de hojaldre "gibanica" es casi tan obligatorio como degustar su vino. Por esto y por más, debes visitar Eslovenia
Liubliana es una mezcla perfecta entre naturaleza y arquitectura. Date un paseo por el parque Tivoli, prueba una "gibanica" en el casco antiguo y admira las edificaciones de Jože Plečnik, como el Tromostovje (el puente Triple).
Una visita a Eslovenia no está completa sin visitar las cuevas de Postojna. Planifica un "tour" guiado y conoce a fondo las impresionantes formas de estas cavernas subterráneas.
Uno de los lugares más populares en Eslovenia es el castillo de Predjama, un majestuoso edificio medieval enclavado en una roca. Recorre su interior y escucha la leyenda del Robin Hood esloveno.
A los más aventureros les encantará visitar el monte Triglav, una montaña exigente, pero accesible. Asegúrate de ir con un guía experimentado que conozca las mejores rutas del lugar.
Cerrando el listado, está el lago de Bled, ideal para realizar rutas de senderismo y observar el hermoso paisaje, que incluye los Alpes Julianos y una isla natural en el centro del lago.
La mejor época para viajar a Eslovenia es durante el verano, de junio a agosto, con temperaturas que rondan los 15 °C durante la noche y los 28 °C durante el día. El clima en el invierno, de diciembre a marzo, puede ser muy frío, y la temperatura puede bajar hasta los −5 °C.
Eslovenia pertenece a la Unión Europea y, por ello, las personas provenientes de países que pertenecen a ella, como España, no necesitan de un visado para viajar allí.
Lufthansa o Air France ofrecen vuelos desde Madrid o Barcelona a Liubliana por unos 300 € y con una duración aproximada de cuatro horas y media.
Llegar en autobús a Eslovenia es preferible desde países cercanos, como Italia. Un viaje de Milán a Liubliana puede durar unas seis horas. Desde España, el trayecto supera las treinta horas.
Hay buenas conexiones en tren para llegar a Eslovenia. Desde Milán, un viaje a Liubliana puede costar unos 100 € y durar hasta ocho horas.
Eslovenia es muy accesible en coche. Desde Berlín, el trayecto puede durar unas nueve horas, mientras que, desde Barcelona, supera las trece.
Desde Venecia, hay conexiones a Piran que duran alrededor de dos horas y cuestan entre 60 y 80 €. Además, existen vagones para transportar coches.
Una buena opción para disfrutar de la naturaleza en Eslovenia es alojarse en casas rurales o granjas turísticas en las montañas. También en las ciudades hay una gran variedad de alojamientos, desde hoteles de lujo, para los presupuestos más acomodados, hasta otros alojamientos, como los hostales, para quienes busquen alguna opción más económica.
El principal medio de transporte público en Eslovenia es el autobús, con una tarifa situada alrededor de 1,20 €. También se puede utilizar el taxi, que cuesta unos 10 € por un trayecto de media distancia.
Eslovenia cuenta con un sistema ferroviario muy eficiente y económico. Los trayectos desde Liubliana a Koper o Maribor cuestan entre unos 10 y unos 20 €.
Los autobuses ofrecen excelentes conexiones para moverse en Eslovenia. Un viaje de Liubliana a Koper puede costar unos 18 €.
La edad mínima para alquilar un coche en Eslovenia es de dieciocho años y el precio de los vehículos varía entre los 15 y los 40 €, según el modelo.
Eslovenia ofrece una amplia gama de actividades, alojamientos y restaurantes para todo tipo de presupuestos. Si alquilas un apartamento o casa rural, el precio de los productos del supermercado para dos personas ronda los 15 € por día, al igual que un plato para una persona en un restaurante. Las atracciones principales, como las cuevas de Postojna, cuestan unos 20 € y el transporte entre ciudades cercanas ronda el mismo precio.